Queremos lectores informados. ¿Y tú?
Apúntate a los boletines de Catalunyapress para recibir información de calidad y rigurosa. "Catalunyapress te informa"
Queremos lectores informados. ¿Y tú? Apúntate a nuestro boletín gratuito
Reino Unido lanzó una alerta hace unos días: siete personas habían sido diagnosticadas con el virus de la viruela del mono. Desde entonces, han aparecido casos en Portugal (que estudia otros cuantos) y España tiene, al menos, ocho casos sospechosos.
Se trata de una enfermedad similar a la viruela humana, que lleva erradicada aproximadamente 50 años, y que pese a su nombre se cree que el reservorio no está en los primates sino en los roedores. Y aunque es endémica de África, solamente uno de los pacientes diagnosticados en Europa viajó a dicho continente en abril, y no se ha identificado un vínculo entre ellos. Por tanto, existe transmisión comunitaria.
El doctor Pablo L. Ortiz Romero, jefe del Servicio de Dermatología del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid, alertó este miércoles de que en una sola mañana habían diagnosticado tres casos, aunque todavía les faltaba la confirmación microbiológica. Acompañó sus palabras de una fotografía en la que se podían ver las lesiones cutáneas ocasionadas por la enfermedad y explicó que el paciente refiere no haber realizado ningún viaje.
¿QUÉ ES LA VIRUELA DEL MONO Y CUÁLES SON SUS SÍNTOMAS?
Como bien decíamos, la viruela del mono es una enfermedad bastante similar a la viruela humana, aunque se cree que ligeramente más leve. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la enfermedad se incuba entre 6 y 16 días, aunque pueden aparecen los síntomas hasta tres semanas después del contagio.
En cuanto a los síntomas, estos se dividen en dos fases. La primera de ellas es el llamado periodo de invasión, en que aparecen fiebre, dolor de cabeza intenso, inflamación de los ganglios linfáticos, dolor de espalda, dolores muscuales y cansancio extremo. Unos días después comienza el periodo de erupción cutánea, en el que aparecen primero lesiones planas en la piel que se convierten en vesículas a las que les acaba saliendo costra, que tarda unos 10 días en caerse.
FACTORES DE RIESGO Y MORTALIDAD
La OMS ha detallado que en los últimos brotes, la mortalidad ha rondado el 10%, aunque en África esta va del 4 al 22%. El grupo de población más afectado es el infantil, siendo los niños los que sufren más complicaciones y muertes por la infección.
Margarita del Val, preguntada por si hay que preocuparse, ha señalado que frente a la viruela "creamos una inmunidad muy potente". Por ello, las lesiones que genera son "locales, se curan solas" y no suelen generan casos graves.
¿CÓMO Y CUÁNTO SE TRANSMITE?
La viruela, años atrás, solía ser poco contagiosa. Fernando Simón explicó que hasta hace poco "no tenían más de una segunda generación de transmisión, pero en los últimos sí que se han detectado de hasta de tercera y cuarta generación, aunque son brotes muy pequeños, autolimitados".
Así, aunque para él "no es probable que la viruela del mono vaya a generar una trasmisión importante", tampoco puede descartase. Más teniendo en cuenta que no se conoce con exactitud cómo se propaga la enfermedad.
Si bien se piensa que puede transmitirse por contacto con la saliva de un infectado o por inhalar gotas salivales o respiratorias expulsadas por otra persona (de forma similar al Covid-19), también existen otras opciones como que sea por contacto con las lesiones cutáneas de una persona enferma. Además, se han documentado contagios intrahospitalarios.
¿CUÁL ES EL TRATAMIENTO?
La viruela del mono no tiene vacuna para prevenirla, ni tampoco existe un fármaco creado específicamente para tratarla. Pese a eso, se cree que las personas mayores vacunadas contra la viruela (pues esta vacuna ya no se inocula) tienen un 85% de protección contra la viruela símica.
Además, algunos estudios evidencian que el fármaco antiviral tecovirimat, que fue aprobado por Estados Unidos para tratar la viruela, podría ser potencialmente útil. Del mismo modo, podrían ser útiles los medicamentos cidofovir y brincidofovir.
Pese a ello, cabe resaltar que estos son tratamientos de apoyo y que, por lo general, las personas que logran superar la enfermedad lo hacen por sí mismas.
Apúntate a los boletines de Catalunyapress para recibir información de calidad y rigurosa. "Catalunyapress te informa"
Escribe tu comentario